Sensores grandes en cámaras pequeñas

Con la aparición de las compactas de objetivos intercambiables, también llamadas 'sin espejo', la fotografía ha tenido una revolución espectacular en mi opinión. Estos modelos acercan la fotografía de calidad (hablando en el terreno técnico, por supuesto) a fotógrafos que no quieren llevar un volumen excesivo a sus espaldas o quieren pasar desapercibidos en ciertos ambientes o situaciones. Permiten obtener una calidad 'profesional' con cámaras que aparentemente no son profesionales pero que en sus entrañas guardan una tecnología muy similar a éstas.

Olympus con sus modelos PEN y OMD, panasonic con sus GF, GX, G, GH, Sony con sus NEX, Fuji con sus X, Samsung con sus NX, Canon con su M... Estas marcas han decidido incluir sensores grandes en cuerpos 'adelgazados' para dar lo mejor que podría dar una cámara en estos tiempos donde la tecnología está avanzando con una velocidad endemoniada. Y en mi opinión ésta debería ser la dirección a tomar por cualquier marca que desee entrar en esta gama de cámaras. Ofrecer un cuerpo pequeño, objetivos pequeños pero con sensor pequeño no compensa teniendo a mano tantos modelos compactos de objetivos no intercambiables a un precio similar y con calidad cercana. Marcas como las anteriormente citadas demuestran que tamaño pequeño no descarta incluir un sensor grande. Este es el acierto de este mercado que sólo lleva unos pocos años.

Por otra parte siempre hay que buscar un equilibrio entre tamaño de cuerpo y objetivos. El sistema M4/3 es el más equilibrado ofreciendo objetivos llamados 'pancakes' (o 'torta') tanto de focal fija como zoom (el caso del panasonic 14-42mm X) junto a objetivos fijos muy luminosos de tamaño comedido y algún telezoom que, no siendo tan pequeño como sería deseable, tiene unas dimensiones aceptables para el sistema. Sony con sus NEX ya aprendió la lección cuando sacó al mercado su zoom 16-50mm pancake. Sus usuarios no entendían que una cámara del tamaño de una compacta tuviera que 'sufrir' el desproporcionado volumen de ese 18-55mm que en un principio sacó (y que todavía vende) en sus primeros modelos NEX. Samsung con sus estupendos fijos (16, 20, 30mm) y un infravalorado 20-50mm también nos mostró que se podía llegar a una calidad réflex con dimensiones bastante comedidas.

En contra tenemos a marcas como Nikon y Pentax que, en mi opinión personalísima, no estuvieron a la altura a la hora de diseñar sus modelos 'sin espejo'. Nikon y su sistema 1 ofrece pequeño tamaño en cuerpos y objetivos, si, pero a costa de un sensor pequeño (aunque mas grande que casi cualquier compacta). ¿Compensa ganar unos milímetros en reducción de tamaño exterior para obtener una calidad de imagen inferior a otras competidoras? ¿y encima al mismo precio?, en mi opinión no. Pentax se salió todavía mas del 'tiesto' y sacó a la luz el sistema 'sin espejos' mas pequeños de todo el panorama actual: el sistema Q. Aquí todo es muy pequeño, objetivos, cuerpos y concretamente el sensor es pequeñísimo. En este caso habla mos de una tamaño de sensor en sus primeros modelos de 1/2.3", mientras que en el último modelo parece que han recapacitado un poco y han dado un 'salto' hacia el 1/1,7". No es un salto muy grande, pero es un salto. Lo peor de este sistema es que no creo que sus objetivos puedan aguantar otro 'salto' a un tamaño mayor y el sistema no tendrá mucho mas recorrido en ese aspecto.

El futuro vendrá cargados de novedades y no a muy largo plazo. Sony ya está ultimando su FF 'sin espejo' y con esto sí estaremos ante otra revolución que muchos estaban esperando y que tendría que haber llegado antes. Sólo espero que los precios que se barajen no sean tan excesivos como los que oferta la verdadera prionera en esto de las cámaras digitales 'sin espejo': Leica.

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